ARDERÍUS: “NO SUPIMOS GESTIONAR LA ADRENALINA”

Silvia Arderíus era una de las debutantes en un Campeonato del Mundo con las Guerreras, una cita que ayer terminó para el equipo que dirige Carlos Viver tras la derrota en octavos de final ante la todopoderosa Noruega. La central del Super Amara Bera Bera es la guerrera que menos minutos ha jugado (40 aproximadamente) porque ocupaba una demarcación clave donde hay una de las mejores jugadoras españolas, aunque le valieron para anotar ocho goles con una serie notabilísima (8/11) y repartir cuatro asistencias. Llegó a la selección para compartir demarcación con Nerea Pena y se marcha después de haber vivido un crecimiento exponencial y con una experiencia que no olvidará nunca. La madrileña analiza el último partido de las Guerreras en Alemania 2017, hace balance del campeonato que se ha disputado y también de las expectativas de los que vendrán en el futuro.

Foto: VGGaribay

No ha podido ser. ¿Comenzasteis muy nerviosas? ¿Os pudo la presión en los primeros minutos?

Bueno… Más que la presión en sí, yo creo que fueron incluso las ganas. Nos traicionaron los nervios en ese sentido. Estábamos con las emociones por las nubes, con la adrenalina muy alta, y no supimos gestionarlo. Sí que entonces aparecieron nervios, yo creo que también por la situación… Ya te digo, creo que fue más la adrenalina de querer ganar y de hacerlo perfecto que el partido en sí.

¿El resultado final ha sido demasiado cruel?

Demasiado cruel… Bueno… Al final, con Noruega puedes perder por bastante más. Creo que no hay que quedarse con el resultado final. Fue anecdótico. Los últimos diez minutos desconectamos del partido, intentamos seguir peleando, pero obviamente fue difícil seguir su ritmo. Nosotras para ganar el partido teníamos que hacerlo todo perfecto y además necesitábamos que ellas fallasen… En la primera parte todavía ellas estuvieron ‘fallonas’ y eso nos mantuvo en el partido, pero en la segunda lo hicieron prácticamente todo perfecto y nosotras, por desgracia, no cumplimos nuestra parte y fallamos sobre todo muchísimos lanzamientos.

¿Qué aspectos positivos y negativos destacarías del encuentro?

Lo mejor es que todo el mundo pensase que podíamos ganar. Me parece incluso lo más positivo de este Mundial en general, el que ayer todo el mundo, tanto nosotras, todas y cada una de las jugadoras, como gente de aquí de otros equipos con los que hablamos, como gente de España que nos escribió… Que hubiésemos generado la sensación de que podíamos ganar a Noruega es con lo que hay que quedarse. Y lo negativo, pues que no supimos gestionar esas ganas que teníamos de hacerlo bien y nos traicionaron un ‘poquillo’ los nervios.

¿Cómo has visto a este equipo durante este campeonato? Seis de vosotras debutabais en un torneo de estas características…

Yo creo que se ha vuelto un poco a lo que era la selección, a esa ilusión que generaba… No sé, esa sensación de que se podía conseguir algo grande que había años atrás. Y nosotras lo hemos vivido con esas ganas. Seguro que el hecho de que hayamos estado ahí jugadoras nuevas pues bueno, quizás hemos dado ese puntito de ilusión, de ganas, de garra que también hace falta. Y así es como lo hemos vivido.

¿Qué potencial le ves a largo plazo?

Yo creo que las Guerreras volverán a conseguir grandes cosas y, seguramente, antes de lo que todos pensamos. Al final, hemos tenido la mala suerte de cruzarnos con Noruega, pero creo que la línea de la selección ha sido claramente ascendente. Hicimos una fase de grupos muy buena, competimos contra equipos que a priori tenían una superioridad inmensa. Y, ya te digo, yo creo que vamos por el buen camino.

¿Cómo ha sido vuestra relación con las veteranas? ¿Qué os dijeron ante un partido como el de ayer?

Sobre todo, lo principal que nos han dicho es que disfrutáramos, que no vale de nada venir aquí para estar nerviosas, que los nervios había que dejarlos en Melilla, en el TIE, y eso… Que disfrutáramos cada momento y que jugásemos como sabemos, que al final estábamos aquí por cómo jugábamos en nuestros clubes y que no intentásemos cambiar eso, que cada una tenemos nuestro modo de jugar y que intentáramos acoplarnos pero sin perder eso que nos hacía especiales.

¿Qué valoración haces a nivel individual?

¡Yo estoy muy contenta! Creo que todas las nuevas hemos ido creciendo aquí poco a poco. Yo me he sentido cada vez más a gusto, he conseguido sentirme una más, es complicado llegar aquí y sentirte importante dentro del equipo, incluso disfrutando de poquitos minutos han conseguido que me sintiera importante. Todas hacíamos falta, todas hemos aportado y ya te digo… Creo que todas las nuevas hemos aprovechado los minutos que hemos tenido y la verdad que en ese sentido estoy muy contenta.

¿Qué es lo que nunca olvidarás de este Mundial? ¿Algún momento grabado a fuego?

Es complicado quedarse con un solo momento, la verdad. En general, ha sido un mes para no olvidar. Te podría decir mi debut mundialista, que fue una pasada, pero es que el primer partido que jugamos contra Angola, aunque no jugué, la victoria fue un recuerdo imborrable… Cualquiera de esos partidos, el empate con Francia… ¡Ha sido todo una pasada! Y luego, cuando llegamos al segundo hotel y nos juntamos con todas las selecciones, encontrarte por los pasillos con jugadoras de la talla de cualquiera de las noruegas, las suecas… La verdad es que es una pasada. Es alucinante [sonríe].